Repost de un extracto del mensaje The greatest words in all of scripture por Paul Washer y traducido por Ira y gracia

He escuchado a varios hombres de Dios decir que si tuvieran que perder toda la biblia y pudieran quedarse con solamente un pasaje, este seria el pasaje que escogerían:

Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios.

Romanos 3:23 NVI

Porque en este pasaje se encuentra la salvación misma de todo hombre, primero que nada dice: Pues todos hemos pecado”. Todos hemos pecado ¿Por qué no temblamos? ¿Por qué no entendemos lo terrible que es esta verdad?

De la misma manera que un pez no comprende que está mojado, nosotros no entendemos lo mucho que hemos pecado, nacimos en pecado, fuimos concebidos en pecado, vivimos en un mundo caído lleno de pecado y no hemos conocido algo más allá del pecado. Nuestra sociedad como dice la Biblia, bebe iniquidad como si fuera agua.

¡Escucha!

Hay algo que debes entender, Hitler no fue una anomalía, Hitler es lo que cada uno de nosotros potencialmente puede llegar a ser y no solo eso debes entender que aún en toda la maldad de Hitler, Hitler mismo seguía siendo restringido por la gracia común de Dios y debes saber que si no fuera por la gracia común de Dios restringiéndote a ti también en tu estado natural harías ver a Hitler como un niñito. El problema es que no entendemos lo que la misma biblia dice acerca del hombre. Los hombres son malvado, tal vez digas no estoy de acuerdo y eso se debe que has adoptado solo algunas de las creencias del cristianismo pero no crees la biblia.

¿Quién tiene que enseñarle a un niño a mentir? ¿Quién tiene que enseñarle a un niño a ser egoísta? o a ¿Abusar de otros niños? NADIE, esas cosas las aprenden solos. Déjalos ser ….. no los disciplines y espera ver su resultado en diez años un moustro, ¿Por qué? porque lo que dice la biblia es verdad y tal vez te tapes los oídos y digas ¡No quiero escuchar! de la misma manera que una persona con cáncer entra en negación y le dice al doctor ¡No quiero escuchar! y al taparte los oídos te estas privando de conocer la única posible solución.

¿Por qué es tan terrible el pecado? Porque se comete en contra de Dios ¿Por qué no temblamos? Por que no entendemos lo que eso significa y ¿Por qué no sabemos lo que eso significa? Porque no entendemos quien es Dios; cuan glorioso y bendito ser, imagina esto por un momento, Dios se encuentra en el día de la creación y le ordena a los planetas que se pongan y se acomoden en sus orbitas en el espacio y todos esos planetas se arrodillan y diciendo amén, le obedecen, le ordena a las estrellas a encontrar su lugar en el espacio y seguir su decreto al pie de la letra y todas se arrodillan y diciendo amén le obedecen, ordena subir a los montes y que los valles se formen y se arrodillen y adoren, le habla al mar y le dice llegarás hasta este punto y no cruzarás de aquí y el mar le adora y Dios te ordena a ti que vengas a Él y le dices ¡NO! . Que malvado es nuestro pecado ¿Lo vez?

Queridos hermanos, se la pasan dándonos solo un lado de la historia. Yo quiero hablarles del amor de Dios de una manera que tal vez nunca hayan oído, pero para que tú y yo podamos realmente apreciar el amor de Dios es necesario que entendamos algo, su amor es exaltado de la misma manera que son exaltadas las estrellas cuando contrastan con un cielo totalmente oscuro, permíteme preguntarte ¿A dónde se fueron hoy las estrellas por la tarde? ¿Acaso alguien las junto en una canasta y se las llevó? ¿Por qué cuando volteaste al cielo no las viste? La respuesta es que había demasiada luz y por tanta luz, no pudiste asombrarte de su belleza y ni siquiera pudiste verlas, de la misma manera no podrás ver nunca la estrellas de la gracia de Dios y de su amor con tanta luz cuando los predicadores se la pasan diciendo que los hombres son buenos.

La única forma de verdaderamente apreciar el amor de Dios y la gracia de Dios es viendo la negra oscuridad del hombre y cuando tú veas la negra oscura realidad de tu propio corazón y te das cuenta que Dios actuó en amor por ti, entonces caerás sobre tus rodillas con el mayor agradecimiento posible y alabarás a Dios.